31.12.12

Agonizando 2012

Hace días que estoy atenta al inminente final de año, pero por alguna razón no podía pararme a contemplar el paso del tiempo y hacer el útil balance, que escrito o mental, hace todo el mundo. Ahora al 2012 ya le quedan pocas horas... y sigo en bolas. 
Desfilan por mi cabeza los momentos significativos del año sin orden alguno: una bajada empinada desde el dique de Chañarmuyo, las canciones en el auto de la Nous, mates con una monjita a través de la reja del Carmelo, el abrazo de mi hermana cuando llegué bastante intacta a la Basílica de Luján, una luna naranja desde la costanera en Mar del Plata, la risa de Rochi cuando un avión chocó contra el escenario de Roger Waters, un nene de Barrionuevo reventando globos mientras se reía desde mis brazos, el montón de nuevas personas que me crucé (y yo que creía que había agotado mi capacidad de conocer gente extraña, já), y el submontoncito de ellas que cobraron un gran protagonismo en solamente un año, etcétera, etcétera, etcétera...
Na, no puedo balancearlo. ¡No me entra todo el año en la cabeza! Me pasaron demasiadas cosas, y batí todas las expectativas. ¡Sobreviví al primer año de mi carrera! Y además de las declinaciones de latín y griego aprendí orgullosamente a hacer un omelette (¡!), andar en bicicleta y caerme con una buena canción de fondo y mucho estilo, masomenos juego al truco y soy toda una experta en el transporte público (Bueno, no la tengo super clara, pero todo lo que aprendí amerita por lo menos una licenciatura).
Cumplí dos importantísimos sueños que tuve toda mi vida: Fui a un boliche en pijama con amigas (también disfrazadas), y me fui con la Trexis "a donde nos lleve el Sarmiento" (terminamos en Luján, después de un tren cancelado, uno con un ventilador despidiendo humo y olor a quemado, y un colectivo)
Aprendí que de verdad el pensamiento positivo pesa viendo a la Nous recontra concentrada estudiando con confianza y a mi misma y a Juampi llegando a la segunda parada rumbo Luján bailando Gangam Style. (Nos preguntaron si recién salíamos y se rieron cuando contesté que teníamos encima como cuarenta kilómetros)
Quise saber más de mi religión, tener bases para defenderla, y conocí maneras de creer recontra diferentes, discutiendo mucho en paz y no tan en paz, aprendiendo de todos y revalorando lo que tenía en casa, lo que absorbí y sigo absorbiendo del que siempre va a ser mi colegio.
Nunca fui muy estática, pero este año me zarpé. Tuve tantos momentos buenos, como la maravilla de saborear el principio de no-contradicción, y estuve recontra perdida, creo que nunca la pasé tan mal. Y también creo que nunca la pasé tan bien. Y todas las situaciones las compartí con gente que se bancó mis problemas objetivos y los problemas de mi retorcida cabeza conmigo. Gente de toda la vida, y gente que conocí hace unos meses. Gente como Pachufrita que casi lloró conmigo el problema de los universales, y mis viejos que sin entender un pomo qué les estaba diciendo, también estuvieron.
Me estoy salteando un montón de cosas, pero bueno. Funes el memorioso hay uno solo, y de cualquier manera no podría analizar todo, porque más que nunca hubo de esos momentos sin palabras que solamente tienen sentido si se asoman a mis ojos.
No sé si habré cambiado mucho, no sé muy bien como soy ahora, pero por lo menos soy más consciente de mí misma. Cada vez se más que menos sé. Pero me encuentro así, y también con otros. Creo que crecí siendo yo misma. Me voy a ocupar de mantener encendida mi chispa idealista siempre, por las dudas.
Quiero seguir descubriéndome en el año que viene. Esa es mi super meta, y también lo que le deseo a todo el mundo: Aceptarme a mi misma, confiar en mi y en Dios a través mío. Vamos a pasar toda la vida con nosotros mismos, así que mejor hacernos amigos. 
Sueño un montón más para el año que viene. Escribir más, bloguear más, leer más, estudiar más, pintar más, crecer más en la fe, encontrarme más con los demás, ayudar más, entender más, preguntar más, saber más, querer más. Vivir más. 


(Fiaca buscar una foto más acorde)

25.12.12

Un holocausto de marketing

- Entonces, ¿qué es asimilación ubicua?
-¿Siempre absorber todo en todas partes todo el tiempo?
-Bien hecho, George. ¿Cómo ustedes hacen para imaginarse algo... si siempre les dan imágenes?¿Quién leyó 1984 el año pasado? Bien. "Doblepensar" ¿Alguien sabe?¿Meredith?
-Tener dos creencias opuestas a la vez y creer en las dos como verdaderas.
-Excelente Meredith. Deliberadamente creer en mentiras mientras sabemos que son falsas. Hay ejemplos de esto en todos los días de nuestra vida: "Oh, tengo que ser linda para ser feliz, tengo que hacerme cirugía para ser linda. Tengo que ser delgada, famosa, estar a la moda..." A nuestros jóvenes les están diciendo que las mujeres son prostitutas, putas, cosas para ser cogidas. Golpeadas, menospreciadas, avergonzadas. ¡Este es un holocausto de marketing! Las 24 horas del día, del resto de nuestras vidas, los poderes estarán trabajando duro para hacernos idiotas hasta la muerte. Entonces, para defendernos a nosotros mismos, y pelear contra esta asimilación y este embotamiento de nuestro proceso de pensamiento ¡debemos aprender a leer! Para estimular nuestra propia imaginación, para cultivar nuestra propia conciencia, nuestro propio sistema de creencias. Todos nosotros necesitamos estas habilidades para defender, para preservar nuestras propias mentes.


Detachment (Es un poco cruda, comprobalo vos mismo por acá)

21.12.12

Humildad, humor, humus.


"La humildad lleva al conocimiento de la realidad interior, al estado de serenidad, a la interpretación de las cosas con sentido de humor. Y el humor hace presentir que todo es posible en nosotros porque estamos formados del barro de la tierra y, por lo tanto, nunca debemos hacer ascos de nada terrenal. El humor es reconciliación con nuestra condición humana, con nuestra terrenalidad y limitación. En el humor reside la posibilidad de ponerse uno de acuerdo consigo mismo tal como es.

En el humor se supera y domina espiritualmente una situación adversa porque, por una parte, se reconcilia uno con ella y, por otra, la supera y relativiza desde el punto de vista de Dios. Ahora bien, si el humor se reconcilia con la realidad y la transforma, puede por el contrario el idealismo equivaler a una huida de la realidad. Puesto que no somos como nos gustaría ser, huimos de la realidad buscando refugio en elevados ideales y elaboramos teorías sobre la vida espiritual sin punto de contacto con la pura realidad de cada día.

El humor siempre está relacionado con el intento de despojar a la realidad de toda máscara. En el humor se encuentra la medida exacta de lo que uno es. La persona capaz de contemplar  sus defectos con una sonrisa, y la que se sabe enredada en la ligaduras de la materia, está en el camino del humor. Ambas distinguen agudamente las imperfecciones del mundo pero no con amargura, desprecio, desesperación o protesta. Aman, a pesar de todo, la belleza de este mundo, profundamente convencidos de que incluso en lo imperfecto reina de alguna manera el orden. Porque, en definitiva, el humor no es cosa del carácter sino de la fe.

Sin humildad existe siempre el peligro de pretender instrumentalizar a Dios. Por eso insisten tanto los místicos en pedir humildad. Sin humildad tendería el místico a identificarse precipitadamente con Dios y ya no habría distancia entre nuestro yo y Dios en nosotros. La humildad protege nuestros encuentros con Dios contra la inflación, contra el ostentoso pavonearse, contra la tentación de identificarse con Dios. Nos protege también contra la tentación de eliminar la figura de Dios de nuestro camino y la de saltar por encima de nuestra humanidad; nos defiende contra el orgullo, el peor enemigo del hombre religioso.

Jesús nos enseñó el camino. No es posible ascender al cielo sin descender a las profundidades de la tierra, al humus, a la terrenalidad humana. Para subir a Dios hay que bajar al fondo de sí mismo. Éste es el camino de la libertad, del amor, de la humildad, de la mansedumbre y misericordia, el camino de Jesús y nuestro camino."




Una espiritualidad desde abajoAnselm Grün y Meinrad Dufner

15.12.12

Reanudando la eterna discusión por los animales...

Victoria- No sé si mi perro puede captar los universales, pero sí creo que tiene conciencia de si mismo, es más mi viejo me dió un buen ejemplo: lo llamás y responde, le decís "Laura" y mira a mi mamá...
Nous- Claro Vicky, yo si creo que puede entender que el es, y en cierto sentido no es...
Victoria- ¡¿VES?! ¡Mi perro sabe más que Parménides!



2.12.12

Hablar con perros furiosos

"Un muchacho ingenuo, es enviado por su padre a rodar por el mundo para que aprenda algo. Una tras otra regresa tres veces el héroe a casa de su padre y cuando éste le pregunta qué ha aprendido, responde la primera vez: he aprendido a entender qué dicen los perros cuando ladran. La segunda vez responde: he aprendido a entender qué se dicen los pajaritos cuando cantan. Y la tercera vez dice: he aprendido a entender qué dicen las ranas cuando croan. Ante estas respuestas, el padre se siente pro fundamente contrariado. Es un hombre que encarna perfectamente los puntos de vista de la racionalidad pura, incapacitado para entender los matices del arte. Y despide a su hijo . El héroe sale de su casa sin rumbo fijo y llega a un castillo donde se le ocurre pernoctar. Pero al dueño no le quedan habitaciones libres, sólo tiene disponible la torre del castillo y en ella hay unos perros tan feroces que ya han devorado a más de un incauto. El héroe no se arredra. Recoge algo para cenar y entra sin temor en la torre. Los perros comienzan a ladrar furiosos pero él se pone a dialogar serena, amistosamente con ellos. Nace la calma y los perros le confían enseguida su secreto: ladran con tanta furia porque guardan un tesoro que hay allí escondido. Le guían por el camino del tesoro, le muestran el lugar y hasta le ayudan a desenterrarlo.

El camino hacia mi tesoro pasa también por el diálogo con los perros furiosos, es decir, el diálogo con mis pasiones, mis problemas, miedos y heridas, con todo lo que ladra dentro de mí y amenaza con tragarse mis energías.
Una espiritualidad desde arriba empezaría por encerrar los perros en la torre y se haría construir al lado un bonito chalet de ideas. Pero siempre habría que vivir allí preocupados ante la posibilidad de que un día los perros pudieran escaparse y devorar al primero que se encontraran por delante. Habría que vivir además en angustia permanente ante la posibilidad de emboscadas de las diversas concupiscencias, ante las tentaciones, constante espiritual en la vida de las personas piadosas. Y sobre todo, quedaría uno aislado de la vida. Todo lo que se reprime o se aparca queda restado de la vitalidad. Los furiosos perros ladradores están plenos de vitalidad. Si los encerramos quedamos privados de su energía, necesaria para llegar a Dios y al encuentro con nos otros mismos. La torre es un símbolo de maduración humana; la torre hunde sus cimientos en la tierra y se eleva al cielo. Es redonda, símbolo de totalidad. Si por un elevado idealismo encerramos y atamos los perros ladradores, nos condenamos a vivir en tensión permanente por miedo a que un día se suelten y salgan. Muchas veces huimos de nosotros mismos, nos da pánico mirarnos al interior por miedo de ver allí un peligroso perro. Pero cuanto más encadenemos los perros tanto más furiosos se vuelven. Se trata, por tanto, de armarse de valor y penetrar en la torre y allí, en paz, dialogar confiadamente con ellos. Pronto nos descubrirán el secreto del tesoro que guardan. Ese tesoro puede ser un nuevo impulso de vida, un nuevo estilo de autenticidad personal, la nueva manera de ser yo mismo hasta completar la imagen que Dios se ha formado de mí."



Una espiritualidad desde abajo, Anselm Grün y Meinrad Dufner

1.12.12

Oh oh oh it´s magic

Pared externa de mi escritorio pintada exclusivamente a dedasos:




"El problema de este mundo es que muchos quieren soluciones mágicas... pero se niegan a creer en la magia" 


Once upon a time
(En realidad es bastante mala, pero podés mirarla por aquí)

Mirar


"La gente dice que estás loco, ¿Sabías? Cuando te fuiste a la guerra dijeron que eras valiente, inteligente... pero ahora te creen loco porque cantás como los pájaros, perseguís a las mariposas, y mirás a las flores. Yo creo que antes estabas loco, no ahora."


Santa Clara a San Francisco de Asís, en Hermano sol, hermana luna
(mirala acá)